Bienvenido a Biblia Viva, tu fuente de estudio bíblico. En este artículo, exploraremos el significado de comisión en la Biblia. Desentrañando las profundidades de este término, entendemos mejor el llamado divino y cómo se relaciona con nuestros roles y responsabilidades espirituales. ¡Prepárate para obtener una visión única de tu vocación según las Escrituras!
Explorando el Significado de Comisión en la Biblia: Un Viaje hacia la Comprensión Profunda
En la Biblia, la comisión es un concepto que se refiere a una orden o mandato específico. Podemos encontrar múltiples ejemplos de esto en varios versículos bíblicos. Sin embargo, uno de los contextos más notables en los que aparece la idea de la comisión es en el término popularmente conocido como la «Gran Comisión».
La «Gran Comisión» se refiere al mandato que Jesús dio a sus discípulos antes de ascender al cielo después de su resurrección. Este mandato se encuentra en el libro de Mateo 28:19-20, y dice: «Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado«.
Aquí, la comisión dada por Jesús fue claramente definida: sus seguidores deberían ir a todas las naciones, hacer discípulos, bautizarlos y enseñarles los mandamientos de Dios. Esto significa que, para los creyentes, la comisión no sólo implica recibir una tarea, sino también obrar activamente para cumplirla.
Observamos otro ejemplo de comisión en la asignación dada a Moisés en el libro de Éxodo 3:10, donde Dios dice: «Por tanto, ve, yo te envío a Faraón para que saques de Egipto a mi pueblo, los hijos de Israel«. De nuevo, la comisión aquí es un mandato muy específico que requiere acción.
En resumen, cuando nos referimos a la comisión en la Biblia, estamos hablando de un mandato o tarea específica que Dios da a sus seguidores. Por lo general, esta comisión implica no sólo recibir la tarea, sino también tomar acciones concretas para llevarla a cabo. Estos ejemplos bíblicos nos muestran que la verdadera obediencia a la comisión de Dios conlleva compromiso, dedicación y un deseo de cumplir activamente la voluntad de Dios.
¿Qué significa la palabra «comisión» en la Biblia?
La palabra «comisión» en la Biblia usualmente se refiere a una tarea o una misión que se le ha confiado a alguien por la autoridad divina. Se utiliza para describir la orden de Dios dada a individuos o grupos para llevar a cabo una tarea particular en su nombre.
Por ejemplo, en el libro de Mateo 28:19-20, Jesús les da la «Gran Comisión» a sus discípulos diciendo: «Id, pues, y haced discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado«. Esta es una orden directa de Jesús a sus seguidores para difundir sus enseñanzas y hacer discípulos en todo el mundo.
De esta manera, cuando se habla de «comisión» en contexto bíblico, normalmente se está refiriendo a una tarea divina y sagrada que se le ha encomendado a uno para llevar a cabo en nombre de Dios. Las «comisiones» pueden ser grandes o pequeñas, pero todas son vitales en el plan de Dios y requieren obediencia de parte de aquel a quien se le ha confiado.
¿Qué es la Gran Comisión en la Biblia?
La Gran Comisión es uno de los mandatos más importantes que Jesucristo dejó a sus discípulos antes de ascender al cielo. Este mandato está registrado en el libro de Mateo, capítulo 28, versículos 16 al 20.
El texto dice: «Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado».
En este mandato, Jesús no sólo les encomienda predicar el evangelio, sino también hacer discípulos, es decir, enseñar a otros a seguir sus enseñanzas y su ejemplo de vida. Además, establece la fórmula trinitaria para el bautismo, reconociendo la igualdad de autoridad y divinidad entre el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.
La importancia de esta comisión reside en que es la última instrucción de Jesús a sus seguidores, y establece un claro llamado a la evangelización y al discipulado en todo el mundo. De acuerdo a la fe cristiana, este mandato sigue vigente hasta el día de hoy y es considerado la principal tarea de la iglesia.
¿Qué significa la comisión de acuerdo con la Biblia?
La «comisión» en el contexto bíblico hace referencia a un encargo o mandato que Dios da a sus seguidores. Uno de los ejemplos más prominentes de este término es la Gran Comisión, que se encuentra en Mateo 28:18-20:
Declara la Biblia: «Y Jesús se acercó y les habló diciendo: “Se me ha dado todo poder en el cielo y en la tierra. Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a guardar todas las cosas que les he mandado; y he aquí, yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo.”
Esta «comisión» es un encargo de Jesús a sus discípulos para que lleven la fe cristiana a todas las naciones del mundo. En ese sentido, la comisión es una tarea importante y sagrada que los seguidores de Dios deben cumplir.
Otros ejemplos de comisiones en la Biblia incluyen la comisión de Dios a Moisés para liberar a los israelitas de la esclavitud en Egipto (Éxodo 3:10) o la comisión de Dios a Jonás para ir a Nínive y advertir a sus habitantes de su inminente destrucción (Jonás 1:1-2).
En resumen, la comisión en el contexto bíblico es una tarea o misión dada por Dios a individuos o grupos específicos para lograr un propósito divino.
¿Qué significa la Comisión de Cristo?
La Comisión de Cristo es un término utilizado para referirse a las instrucciones finales que Jesús dio a sus discípulos después de su resurrección y antes de ascender al cielo. Estas instrucciones se encuentran en Mateo 28:18-20 y Marcos 16:15-18, y son consideradas uno de los momentos más significativos del Nuevo Testamento.
El pasaje más citado es Mateo 28:18-20, en donde Jesús dice: «Id, por tanto, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado.»
En este pasaje, Jesús da tres comandos claros: ir, bautizar y enseñar. La instrucción de «ir» indica que los seguidores de Jesús deben ser proactivos en su labor evangelizadora. No deben simplemente esperar que la gente venga a ellos, sino que deben buscar activamente a aquellos que necesitan escuchar el mensaje del Evangelio.
El comando de «bautizar» sugiere que los nuevos creyentes deben ser iniciados en la comunidad cristiana mediante el bautismo, que es un signo de la nueva vida que han obtenido a través de Jesucristo.
Por último, la instrucción de «enseñar» implica que los discípulos deben educar a los nuevos creyentes en la fe, ayudándoles a comprender y seguir las enseñanzas de Jesús.
Así que, la Comisión de Cristo esencialmente se trata de la responsabilidad que tienen los cristianos de llevar el Evangelio a todo el mundo, de bautizar a los nuevos creyentes y de enseñarles las enseñanzas de Jesús. Es un mandato que sigue siendo relevante para los cristianos de hoy.
Preguntas Frecuentes
¿Qué significa la comisión en el contexto de la Biblia?
En el contexto bíblico, la Comisión se refiere a la Gran Comisión, un mandato que Jesús dio a sus discípulos antes de ascender al cielo. Según los libros de Mateo (28:16-20) y Marcos (16:15-18), Jesús instruyó a sus seguidores a «ir y hacer discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a guardar todo lo que él les ha mandado». Por lo tanto, en el contexto bíblico, la comisión es una instrucción dada por Jesús para difundir su enseñanza a toda la humanidad.
¿Cómo se representa la comisión en diferentes versículos bíblicos?
La comisión en los versículos bíblicos se representa principalmente como la tarea o misión que Dios otorga a sus seguidores. Un ejemplo destacado es la Gran Comisión en Mateo 28:19-20: «Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo; enseñándoles a guardar todas las cosas que os he mandado». Aquí, la comisión es un llamado a compartir el Evangelio. En Marcos 16:15, se presenta de manera similar: «Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación». Estos versículos muestran cómo la Biblia representa la comisión como una responsabilidad dada por Dios para extender su palabra y amor a otros.
¿Cuál es la importancia de la comisión en las enseñanzas bíblicas?
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La comisión en las enseñanzas bíblicas se refiere a menudo a la «Gran Comisión» que Jesús dio a sus discípulos en Mateo 28:19-20: «Id, pues, y haced discípulos a todas las naciones«. Esta comisión es importante porque marca la responsabilidad de los creyentes de compartir el Evangelio y hacer discípulos en todo el mundo. Es un llamado a la expansión de la fe y la construcción del Reino de Dios en la tierra.
En conclusión, la comisión en la Biblia tiene una importancia crucial en el crecimiento espiritual de cada creyente. No solo se trata de una tarea o responsabilidad otorgada a una persona, sino también de una llamada divina para propagar la palabra de Dios y llevar a cabo su obra en la tierra.
Hemos explorado que la comisión involucra el compromiso de que el individuo está dispuesto a sacrificarse y ofrecer sus habilidades y dones para el servicio divino. Es esta responsabilidad sagrada que cambia la vida de aquellos que son comisionados y también toca los corazones de las personas que entran en contacto con ellos.
La Gran Comisión, como se detalla en el libro de Mateo (28: 19-20), es la más significativa y trascendental de todas, siendo una directiva de Jesús para todos los creyentes de compartir las Buenas Nuevas de salvación con el resto del mundo. Al cumplir con estas comisiones, los cristianos no solo demuestran su amor a Dios, sino que también ayudan a expandir Su reino en la tierra.
Esta reflexión sobre el significado de comisión en la Biblia nos debería motivar a repensar nuestro propio rol y misión dentro de nuestras comunidades. Se nos invita a llevar a cabo nuestra propia «comisión» en nuestras vidas diarias, no necesariamente a través de grandes gestos, sino en las pequeñas acciones de bondad, servicio y amor hacia el prójimo. Así, cada uno de nosotros, no importa cuán pequeño pensemos que es nuestro aporte, somos parte de esa Gran Comisión, y tenemos el potencial de hacer una diferencia.
